competición de aburridos
Cuando uno lee sobre vidas ejemplares de grandes hombres, genios, santos y similares, resulta que eran todos tan puros, tan buenos, tan abnegados y tan todo, que, en general, iban a tener bastante fácil ganar en una competición de aburridos.Sin embargo hay otros que, aunque nunca los pongan de ejemplo, tuvieron una vida digna de imitar.
El emperador romano de procedencia siria Vario Avito Basiano (205-222), coronado a los 14 años con el nombre de Marco Aurelio Antonino, aunque más conocido con el sobrenombre de "Heliogábalo", tuvo una de esas vidas extravagantes que provocan mi envidia, pero envidia de la mala.
